El ex árbitro grancanario Santiago Marrero Hernández, que durante varias temporadas llegó a militar en Tercera y Segunda División B nacional, falleció en la jornada de este sábado, 11 de noviembre, en la capital grancanaria.
Sus restos mortales, que se encuentran en la sala 104 del tanatorio de San Miguel, serán incinerados a las dos de la madrugada de este domingo.
El arbitraje futbolístico es una gran familia. Aunque Santiago llevaba más de diez años fuera del arbitraje, su repentina pérdida fue sentida por sus ex compañeros como si siguiera formando parte del colectivo y algunos de ellos no dudaron un minuto en acercarse hasta el tanatorio para expresar su solidaridad a la familia. Así lo hicieron los vecinos del barrio de Tamaraceite, de donde era originario.
Marrero formó parte del Comité Técnico de Árbitros de Las Palmas durante algo más de una decena de años. Tras su paso por las categorías regionales, dio el salto a la Tercera División, categoría en la que permaneció un lustro antes de experimentar el ascenso a Segunda División B. Poco tiempo después de su descenso decidió abandonar el arbitraje.
Su labor dentro del Comité Técnico de Las Palmas no sólo se centró en el ámbito deportivo, sino en el formativo. A finales de la década de los 90, dados sus amplios conocimientos en reglas de juego y didáctica, formó parte del claustro de profesores encargado de la formación de futuros árbitros.