Un futbolista grancanario de categoría juvenil preferente ha sido sancionado con tres años y medio de suspensión por agredir a un árbitro en el transcurso de un partido desarrollado a comienzos de la presente temporada en el municipio de Gáldar.
El Comité de Competición y Disciplina Deportiva de la FIFLP también acordó, en su sesión del 19 de septiembre de 2018, dar por concluido el partido, disputado el siete de septiembre entre Unión Moral Gáldar y Vallinámar, con el resultado de 3-1 a favor del equipo local.
Contra la resolución del Comité cabe interponer recurso ante el Comité de Apelación en el plazo de 10 días hábiles, a contar desde el siguiente al que reciba la notificación.
La agresión al árbitro, que precisó de asistencia médica en un centro hospitalario y que denunció los hechos ante la Guardia Civil, se produjo en el minuto 68 del partido, poco después de que el futbolista del Vallinámar fuera expulsado.
Según consta en el acta, el colegiado recibió un puñetazo en el labio, agresión que se tradujo en hinchazón, hemorragia y mareos.
En relación con este incidente, que se produjo el 7 de septiembre, el Comité de Competición había tomado la decisión de suspender provisionalmente al jugador por tres meses.